Sexy, provocadora, bizarra y
además, millonaria. Incluso más que su padre, Billy Ray Cyrus, icono del
country contemporáneo que en 23 años de carrera ha juntado una fortuna
de $50 millones.
Su hija Miley, en la tercera parte de ese tiempo, ya tiene $150 millones, según Forbes.
Su
secreto es, analizan expertos, el manejo de su imagen provocadora.
¿Quién puede olvidar su presentación en los MTV Video Music Awards, su
pelea tuitera con la cantante Sinead O’Connor o la censura que la
revista Love hizo a una de sus fotografías, donde aparece con un pene
dibujado en su calzoncillo color nude?
Pero
¿qué tanto hay de auténtico en esta actitud por parte de la artista?
“Miley Cyrus así es en esencia, escandalosa, puede ser que le guste la
marihuana, puede que sea muy sexual, así es ella, pero además así es el
producto artístico que se está construyendo”, declaró Álvaro Gordoa,
consultor de imagen pública.
Para el
sicólogo Alexis Solís, la forma en la que actúa en público debe tener
una relación muy estrecha con su personalidad, pues no parece que le
genere conflictos internos, ya que de lo contrario “no hubiera aceptado
hacer lo que hace, debe de ser algo acorde esa imagen hipersexual con su
forma de ser”.
Un ejemplo es su
video Wrecking Ball, donde luce su desnudez sin pudor mientras se
columpia en una bola de acero y luego lame un martillo.
¿Pero atraer la atención del público por su exhibicionismo, mala conducta y escándalos podría dejar de lado su talento?
“El
hecho de que en este momento la forma esté pesando más que el fondo en
el caso de Miley, es cierto, pero no tiene que ser negativo porque
finalmente es un producto musical que vende tanto el fondo como la
forma”, dice Gordoa.
El resultado es que Miley ha obtenido el éxito y reconocimiento de los fans y la crítica.
No
sólo sus escándalos han dado de que hablar pues su actual placa
discográfica Bangerz obtuvo críticas favorables y algunos medios, como
Los Angeles Times, han calificado su trabajo de “provocativo y
desfachatado. Miley pasó gran parte de su adolescencia representando a
dos personas (en su show de Hannah Montana), así que tiene sentido que
su álbum tenga una especie de personalidad disociada”, detalló el
diario.
El resultado es dinero en el
bolsillo de Cyrus. Sus primeros tres discos solistas, en donde mantenía
una imagen ligada a una adolescente rosa, debutaban con ventas de 100 a
120 mil copias en una semana. Bangerz, el más reciente, rompió ese
récord: colocó 270 mil en ese lapso.
Aunque
eso puede ser bueno para su éxito en las ventas, críticos como Horacio
Villalobos señalan que esto mismo hace que en ocasiones el disco
tropiece. “Su propuesta se siente forzada, aunque su gran voz y talento
salvan su propuesta”. Para Gordoa, las personas que siguen la ex chica
Disney no lo hacen únicamente por su calidad musical. “Eso es un mero
pretexto para lucrar y vender, siguen a la figura artística popular que
vende todo un concepto”.
Aunque hay un riesgo para Miley: el desgaste anímico. “Los cambios fisiológicos y sicológicos te orillan un poco a ‘bajarle’”.
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